El motivo por el cual ni Shakira ni Gerard Piqué confirmaron el embarazo de la cantante colombiana se debe a que las cosas están algo complicadas.
"Uli", el nombre elegido para este niño que apenas supera los cuatro meses de gestación, podría correr un riesgo de la salud dado que su madre contrajo toxoplasmosis.
Se trata de una enfermedad infecciosa que suele ser transmitida por los animales, en especial por el contacto con las heces de felinos, o bien por el consumo de carne cruda o vegetales y frutas mal lavadas. El parásito en cuestión puede ser combatido con medicamentos, pero el riesgo de la transmisión al feto es un hecho.
El caso es que la princesa del pop latino atraviesa un cuadro complejo y quizás ante la gran cantidad de análisis clínicos a los que se está sometiendo ya se develó el sexo de la criatura.
¿Puras especulaciones? Hasta que no lo escuchemos de boca de Shakira nada es completamente seguro. Sin embargo, esta nueva explicación en torno al secreto estado de la artista tiene sentido.
¿Cómo prevenir este tipo de patologías? Lavándose las manos antes de comer, evitando el contacto directo con las deposiciones de los animales (si se tiene un gato en casa lo ideal sería higienizar sus elementos usando guantes) y asegurando la buena cocción de los alimentos.
Tomando los recaudos necesarios, la pareja saldrá adelante muy pronto.
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